jueves, 16 de julio de 2015

Día de la Virgen del Carmen

¡Hola!:

El verano para mi es un no parar de gente en casa, pero el día de hoy siempre, desde pequeña, ha sido especial.

Es una historia que me contó mi madre y aunque yo no he sido nunca muy creyente, nunca dudé que fuera verdad.. 

Parece ser que al poco de nacer vieron que mi mano derecha no se movía apenas, la tenia siempre doblada y pegada al pecho. Mis padres se dejaron un buen dinero que apenas tenían, llevándome a cualquier medico que les dijeran que era bueno y todos coincidieron en que nunca podría moverla bien.

Mi madre era muy devota de la Virgen del Carmen, cuya festividad se celebra hoy 16 de Julio, por lo que hizo una promesa…."ir detrás de la Virgen, descalza, para que yo me curase y llegar hasta Villasequilla, que era su pueblo, andando ese día".

Yo tenia apenas 3 años y me dejó a cargo de mi hermano Pablo que siempre fue muy protector y responsable y marchó a cumplir su promesa. Cuando regresó, dice que estábamos jugando a saltar en la cama y mi brazo se  movía sin dificultad. ¿Milagro, causalidad? … ¿Quién lo sabe? el caso es que desde entonces acompañé a mi madre a la procesión de Villasequilla y después, si no podía por trabajo estar con mi madre, iba donde estuviera a la procesión y sigo con esa tradición.


Hoy como cada 16 de julio iré y aquí se hace marinera. Por lo que subiré en barco a acompañar a la Virgen y me emociono muchísimo recordando a mi madre. Mientras  viva y pueda seguiré con esa tradición.

Mientras fui pequeña, nos llevaba mi padre en la bicicleta, ¡la de pedaladas que habrán dado esas piernas!!!.

Una vez, yo debía tener 5 ó 6 años,  al volver a la Colonia, mi madre iba en el sillín, de lado y yo sentada encima de ella. Mi padre dando pedales cogió un bache y allá que fuimos al suelo, mi madre sin soltarme, quedamos en medio de la carretera. Mi padre se ve que ni se enteró, solo que al aligerar el peso  corría mas que  bahamontes. Yo llorando del susto, mi madre ante la situación  le dio por reír, mi padre cada vez mas lejos, hasta que pudo dejar de reír y llamarle para que diera la vuelta. 

Afortunadamente no nos pasó nada, nuevamente la Virgen del Carmen nos protegió.
  • Autora: Ángeles González Segovia

No hay comentarios :

Publicar un comentario